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El psyllium rubio o Plantago ovata es una planta originaria de la India y de Oriente Medio. Este superalimento bastante discreto, poco conocido y sin adornos, tiene unas propiedades que te dejarán boquiabierto.
Así como su primo el psyllium marrón no tiene virtudes terapéuticas, el psyllium rubio se ha utilizado durante milenios y ha demostrado su eficacia frente a las patologías intestinales. ¡Los problemas como la regulación del tránsito, la facilitación de la digestión, el estreñimiento o incluso un nivel alto de colesterol no lo asustan en absoluto!
Vayamos al meollo del asunto para descubrir todos los beneficios que ofrece de esta planta milagrosa.
El nombre de estas semillas de psyllium proviene del griego «psyllia» que significa «chip». Este superalimento se llamó así porque estas semillas no solo son pequeñas sino también extremadamente livianas: 1000 semillas pesan solo 2 g.
El spylium no es un descubrimiento actual, ¡ni mucho menos!, sino que ha sido utilizado durante más de mil años por los egipcios para ayudar a la digestión. También se utilizaba en la medicina tradicional india, y encontró la manera de apoderarse de Asia y luego de Estados Unidos. Finalmente, en 1996, el psyllium recibió su debido reconocimiento y fue aprobado como remedio por la Agencia Danesa de Medicamentos para los siguientes problemas: estreñimiento, colesterol alto, diarrea e intestino irritable.
Sin embargo, su recorrido no se detiene en esta aprobación y posteriormente fue reconocido por una institución estadounidense que confirmó sus virtudes en términos de reducción de enfermedades cardiovasculares. ¡Qué superpoderes!
Los beneficios del Psyllium
Debes saber que las semillas de psyllium no es lo que se consume. De hecho, solo el tegumento (cáscara) tiene beneficios en la semilla, que llamaremos «el Grial».
Una vez lo tomas nuestro querido psyllium formará un gel al contacto con el agua, que a su vez protegerá las mucosas intestinales y facilitará y activará el tránsito. Averigüemos qué otros beneficios nos puede esconder el psyllium…
Psyllium frente a patologías intestinales
El psyllium rubio es principalmente conocido por ser un laxante natural, pero también es conocido por los beneficios que aporta a los intestinos.
Todos sufrimos alguna vez problemas intestinales debido a una mala alimentación, ingesta excesiva de medicamentos, o incluso a causa de aditivos o elementos químicos presentes en nuestra alimentación.
El psyllium se hincha durante la digestión y por lo tanto facilita el tránsito intestinal y la digestión. Al hincharse, también atrapa toxinas y limpia las paredes del intestino. Por esta razón, este superalimento es muy conocido por ser utilizado en casos de estreñimiento, diarrea, disentería, colon irritable, inflamaciones, hemorroides y muchos más.
Si quieres luchar aún más eficazmente contra los trastornos digestivos y otros inconvenientes, te recomendamos que lo combines con guaraná. ¡Ya nos contarás tu experiencia!
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Ayuda a la pérdida de peso
Si bien es cierto que el psyllium tiene muchos poderes, no debemos esperar una pérdida de peso equivalente a meses de deporte intenso (¡para nuestro gran pesar!). Sin embargo, sí que actúa como supresor del apetito. Absorbe hasta 50 veces su volumen en agua, se hincha y eso es lo que provoca una sensación de saciedad. El pequeño truco para que sea más efectivo es consumirlo aproximadamente 1 hora antes de comer.
Dado que el psyllium no es un alimento, no es absorbido por el cuerpo y también participa en la reducción de grasas y azúcares presentes en el cuerpo. Si necesitas ayuda en tu pérdida de peso, te recomendamos combinar psyllium con chlorella para un mayor efecto supresor del apetito y para la regulación de grasas y azúcares en el cuerpo.
Lucha contra la diabetes
En un estudio en pacientes con diabetes tipo 2, los investigadores demostraron que el psyllium rubio reducía los niveles de glucosa en sangre. Cuando este superalimento se toma mezclado con otros alimentos, modifica la textura y la viscosidad de estos y así reduce su índice glucémico.
Si padeces de diabetes tipo 2, te aconsejamos que consultes a tu médico antes de comenzar una cura de psyllium rubio.
Psyllium y colesterol
Como se menciona en Les origines du Psyllium, la Administración de Drogas y Alimentos de los EEUU (FDA) ha afirmado que el psyllium rubio tiene efectos en la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares. Canadá tomó el relevo al publicar un estudio que mostraba los efectos del psyllium sobre el colesterol. De hecho, gracias a las fibras que contiene, este superalimento ayuda a reducir la absorción de colesterol por parte del organismo. Estos resultados se observan en personas con un nivel de colesterol demasiado alto y no en aquellas que tienen un nivel dentro de la norma.
Prevención de ciertas enfermedades cardiovasculares
En personas con sobrepeso o presión arterial alta, también se ha demostrado que el psyllium rubio ayuda a reducir la presión arterial.
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Efectos secundarios, precauciones y contraindicaciones
Efectos no deseados
Aunque el psyllium no es un medicamento, puedes experimentar un efecto secundario: la sensación de hinchazón.
Es común y normal que esto suceda cuando empiezas una su cura, pero si este problema persiste, debes reducir la dosis diaria de psyllium, incluso puede que necesites suspenderla por un tiempo. Cuando pase un tiempo, reanuda el tratamiento muy gradualmente.
Precauciones
Es importante mantener el psyllium fuera del alcance de los niños, podrían atragantarse accidentalmente al llevárselo a la boca.
Si estás en tratamiento y tomando medicación, lo mejor es espaciar con al menos 1 hora de diferencia los medicamentos y el psyllium.
Recuerda que es muy importante beber mucha agua después de tomar psyllium.
En general, debes tener en cuenta que el estreñimiento no es una condición normal y a veces esconde algo más serio. En algunos casos es mejor confiar en un profesional de la salud.
Por último, no dudes en consultar a un médico si puedes tomar psyllium, sobre todo si no tienes un estado de salud estable.
Contraindicaciones
Está contraindicado tomar psyllium en caso de: dificultad para tragar, alergia, fiebre, náuseas, vómitos, dolor abdominal, presencia de sangre en las heces, cualquier tipo de obstrucción intestinal o presencia de una impactación fecal.
Dosis
Debes saber que todos pueden beneficiarse de las virtudes del psyllium rubio: hombres, niños, mujeres (¡embarazadas, amamantando o no!) e incluso bebés. Es importante mencionar que los niños y bebés no toman las mismas dosis que los adultos.
¿Cuál es la dosis diaria?
El psyllium rubio no es ni un fármaco ni un alimento, ya que no existe una dosis recomendada. La dosis será diferente dependiendo de la persona, sus necesidades y el problema a tratar. Todo es cuestión de paciencia para encontrar LA dosis ideal.
Recomendamos tomar 3 cucharadas diarias, en diferentes momentos del día. Sin embargo, es posible que una dosis más ligera te vaya mejor.
También es mejor empezar con una cucharadita diaria para evitar la hinchazón y luego aumentar gradualmente las dosis hasta obtener el resultado deseado.
El psyllium también puede liberar a los bebés de un posible estreñimiento. Para ello diluye ½ cucharada en agua, zumo o cualquier alimento semilíquido. Observa los resultados y repite la operación unos días después si es necesario (hasta 3 dosis al día). ¡Asegúrate de que tu hijo bebe lo suficiente después de tomar el psyllium!
Respecto a la ingesta de superalimentos para tu bebé, es muy importante que consultes a un médico que pueda orientarte según el niño y su caso.
¿Cómo tomar psylium?
Ya sea en polvo o en cápsulas, es fundamental beber psyllium con una gran cantidad de agua porque se hincha de volumen.
Si eliges tomarlo en polvo, lo más fácil y común es beberlo diluido en un vaso grande de agua o zumo. Una vez esté completamente mezclado, es mejor beberlo rápidamente para evitar que se gelifique en el vaso y se vuelva más difícil de ingerir (¡y menos efectivo cuando llegue a tu cuerpo!). Cuando te hayas bebido la mezcla, te recomendamos enjuagar el vaso y servirte más agua.
Si te decantas por las cápsulas, es todavía más sencillo: ¡un gran vaso de agua y listo!
Para los más aventureros, ¡también pueden mezclar su psyllium en sopas, yogures e incluso hacer mezclas para pasteles!
Por último, para deleite de algunos de vosotros, el psyllium rubio no contiene gluten y es apto para veganos (no tiene aditivos).
¿Dónde comprar Psyllium?
El psyllium rubio se encuentra fácilmente en tiendas de productos ecológicos, en Internet o en farmacias. La mayoría de las veces, lo encontrarás en forma de polvo o cápsulas.
Advertencia: si deseas comprar tu psyllium en una farmacia, asegúrate de que sean cáscaras de psyllium rubias y no una preparación de laboratorio hecha de psyllium. Además, debes tener cuidado con lo que compras: el llamado psyllium marrón o negro es completamente ineficaz y, en cambio, podría irritar las membranas mucosas.
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